Un momento del Rosario dirigido por el cardenal Gambetti en la Plaza de San Pedro en la tarde del domingo 23 de marzo Un momento del Rosario dirigido por el cardenal Gambetti en la Plaza de San Pedro en la tarde del domingo 23 de marzo  (VATICAN MEDIA Divisione Foto)

Que el regreso del Papa sea un signo de esperanza para quien sufre

Anoche, en la Plaza de San Pedro, se rezó el Rosario por el Pontífice, quien durante esa mañana había regresado a la Casa Santa Marta tras el alta del Hospital Gemelli. Dirigió la oración mariana el cardenal arcipreste de la basílica vaticana: «La oración que lo ha acompañado durante este mes de trepidación, dijo, se convierte en una súplica al Señor para que lo bendiga con una pronta y completa convalecencia, dándole la fuerza y la salud para seguir guiando al pueblo de Dios»

Vatican News

“Con gran alegría el Papa ha regresado a casa, y queremos dar gracias a Dios, junto con María. Queridos hermanos y hermanas, estamos aquí reunidos una vez más en oración, unidos de corazón y de espíritu, por nuestro amado Santo Padre, el Papa Francisco, a quien la Iglesia ha esperado con gran confianza durante este tiempo de enfermedad. Que su regreso a casa, aquí en el Vaticano, en el corazón de la Iglesia, sea un signo de esperanza para todos los que en este momento afrontan con valentía y confianza la hora del sufrimiento”

Fueron las palabras con las que el cardenal arcipreste de la basílica vaticana, Mauro Gambetti, introdujo anoche, 23 de marzo, en la Plaza de San Pedro, el Rosario por el Papa, que esa misma mañana había sido dado de alta del hospital Gemelli tras una hospitalización de más de un mes.

La cita se renueva cada noche desde el 24 de febrero para pedir la gracia de la recuperación del Pontífice. Y anoche tuvo lugar una oración especial por el regreso del Pontífice a casa.

«Nuestra oración, que lo ha acompañado durante este mes de trepidación, continúa y se convierte en una súplica al Señor para que lo bendiga con una pronta y completa convalecencia, devolviéndole la fuerza y la salud para seguir guiando al pueblo de Dios con amor, sabiduría, y vigor», dijo Gambetti, quien invitó a los fieles a meditar juntos los Misterios del Santo Rosario «invocando la intercesión de María, Madre de la Iglesia, para que siga sosteniendo a nuestro Papa con su maternal protección».

 

El rezo de los Misterios gloriosos

Ante la imagen de María Mater Ecclesiae colocada en el atrio de la Basílica Vaticana, el vicario general de Su Santidad dirigió la oración mariana ante la presencia de otros cardenales, obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas de la Curia Romana y de la diócesis de Roma, y de cientos de fieles que también se congregaron a la luz de las antorchas para encomendar a la intercesión de la Virgen al Sucesor de Pedro, que desde ayer comenzó una convalecencia de un par de meses, según las indicaciones de los médicos.

Tras la meditación de los Misterios gloriosos y el rezo de la Salve Regina, el celebrante concluyó con las Letanías de Loreto, invocando a Dios para que nos conceda «gozar siempre de la salud del cuerpo y del espíritu», nos libre «de los males que ahora nos entristecen» y nos conduzca «a la alegría sin fin». Posteriormente, la asamblea entonó el Oremus pro Pontifice y fue despedida por el cardenal con la bendición.

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24 marzo 2025, 11:47