VATICANO

Cuarenta días para devolver el primado a Dios

Anunciar a Cristo significa mostrar que creer en Él y seguirlo no es sólo algo verdadero y justo, sino también bello. En el corazón del Evangelio está la belleza del amor salvífico de Dios manifestado en Jesucristo muerto y resucitado. Inspirados en estas palabras del Papa Francisco, para vivir la Cuaresma y la Pascua, continúa la colaboración entre Vatican News y la Biblioteca Vaticana: cada semana una obra maestra de las colecciones pontificias acompañada por las palabras de los Papas.

Paolo Ondarza - Ciudad del Vaticano

El Misal conservado en la Biblioteca Vaticana fue realizado para el cardenal Lorenzo Pucci, que vivió entre 1458 y 1531. Constituye un precioso testimonio entre los códigos iluminados realizados en Roma en el primer cuarto del siglo XVI. El conjunto decorativo se atribuye, al menos en parte, a la actividad del artista lombardo Matteo da Milano: consta de iniciales vegetales ornamentadas y frisos marginales enriquecidos con motivos florales, perlas y camafeos de gusto anticuario y tres iniciales mayores historiadas.

Misal del cardenal Lorenzo Pucci Chig. C.VIII.228 Roma, 1513-1521 (mm 370x270; ff. 1-170) (© Biblioteca Apostolica Vaticana)

La primera escena, representada en el ojal de la M de Misereris omnium domine, presenta la imagen de la Bendición de las cenizas. El miniaturista destaca el gesto solemne de la imposición de la ceniza durante la Santa Misa; Cristo sostenido por los ángeles dolientes y la imagen del Triunfo de la Muerte se suceden en las páginas siguientes.

Las palabras del Papa

“Pongámonos en camino por medio de la caridad: nos han dado cuarenta días favorables para recordarnos que el mundo no se cierra en los estrechos límites de nuestras necesidades personales y para redescubrir la alegría, no en las cosas que se acumulan, sino en el cuidado de aquellos que se encuentran en la necesidad y en la aflicción. Pongámonos en camino por medio de la oración: se nos otorgan cuarenta días favorables para dar a Dios la primacía de nuestra vida, para volver a dialogar con Él de todo corazón, no en ratos perdidos. Pongámonos en camino por medio del ayuno: se nos ofrecen cuarenta días favorables para reencontrarnos, para frenar la dictadura de las agendas siempre llenas de cosas por hacer; de las pretensiones de un ego cada vez más superficial y engorroso; y de elegir lo que de verdad importa.”

(Papa Francisco - Miércoles de Ceniza 22 de febrero de 2023)

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